Trailer oficial del lanzamiento del libro
Seguimos con la última parte del análisis de la saga de La Escuela del Bien y el Mal. Pueden consultar los resumenes y la primera parte del análisis en este post y la segunda parte en este.
Contenido
Resumen de los tres tomos (Post 1)
Análisis:
1) Reescritura de fórmulas (post 1)
2) Acerca de las formulas clásicas (post 1)
3) Sobre lo metafantástico (post 2)
4) Análisis y comentarios sobre el Bien y el Mal (post 2)
4.1) El código del mal (post 2)
5) Deshilachado final (post 3)
5) Deshilachado final
Aunque el libro recogió muchos clichés y simplismos casi toda la saga me pareció creativa y bien armada. Y digo casi porque las revelaciones del último libro dejaron mucho que desear.
Hablo del origen de Sophie y Agatha (spoiler): Son nada más y nada menos que las hijas mellizas de una mujer superficial y egoísta, que usó magia negra para enamorar al padre de Sophie. Siendo esta última hermosa y perfecta desde bebé fue la que tomó para forzar a su padre a formar matrimonio y desechó a la fea de Agatha; quien fue rescatada por la bruja que la asesoró en todo el proceso y al mismo tiempo fue una antigua profesora de la Escuela del Mal.
Me pareció un último esfuerzo para sorprender al lector por parte de una mente que no sabe cuándo decir basta.
Es tan poco original y fuera de lugar que el mismo final lo podemos encontrar la saga del Cirque Du Freak: el protagonista descubre que él y su mejor amigo/enemigo principal son los hijos secretos mellizos pero de diferentes madres de una entidad similar al Destino hecha hombre, que hacía un experimento con ellos.
Lo único que agregó el origen retorcido de Sophie y Agatha fue poder signarlas como “elegidas y especiales” desde nacimiento. Lo que se corresponde con una fórmula muy popular pero que a la vez es una plaga de la literatura moderna que ya está quemada.
Aunque el libro recogió muchos clichés y simplismos casi toda la saga me pareció creativa y bien armada. Y digo casi porque las revelaciones del último libro dejaron mucho que desear.
Hablo del origen de Sophie y Agatha (spoiler): Son nada más y nada menos que las hijas mellizas de una mujer superficial y egoísta, que usó magia negra para enamorar al padre de Sophie. Siendo esta última hermosa y perfecta desde bebé fue la que tomó para forzar a su padre a formar matrimonio y desechó a la fea de Agatha; quien fue rescatada por la bruja que la asesoró en todo el proceso y al mismo tiempo fue una antigua profesora de la Escuela del Mal.
Me pareció un último esfuerzo para sorprender al lector por parte de una mente que no sabe cuándo decir basta.
Es tan poco original y fuera de lugar que el mismo final lo podemos encontrar la saga del Cirque Du Freak: el protagonista descubre que él y su mejor amigo/enemigo principal son los hijos secretos mellizos pero de diferentes madres de una entidad similar al Destino hecha hombre, que hacía un experimento con ellos.
Lo único que agregó el origen retorcido de Sophie y Agatha fue poder signarlas como “elegidas y especiales” desde nacimiento. Lo que se corresponde con una fórmula muy popular pero que a la vez es una plaga de la literatura moderna que ya está quemada.
6) Bonus: Cosas de chicas escritas por un hombre:
Este último comentario es accesorio pero quiero sacarlo de mi pecho: Este libro me hizo decir varias veces “cómo se nota que lo escribió un hombre”.
Se nota en lo vacías que fueron las princesas del Bien. Daba la impresión de que el autor no sabía cómo desarrollarles una personalidad que no se peleara con la superficialidad que debían tener estas chicas.
Se nota en el aire extremista anti hombres que adoptan las muchachas en el segundo libro y al que renuncian posteriormente, felices de volver a arreglarse el cabello.
Y se nota en varios pequeños momentos demasiado cursis y rosa.
Este último comentario es accesorio pero quiero sacarlo de mi pecho: Este libro me hizo decir varias veces “cómo se nota que lo escribió un hombre”.
Se nota en lo vacías que fueron las princesas del Bien. Daba la impresión de que el autor no sabía cómo desarrollarles una personalidad que no se peleara con la superficialidad que debían tener estas chicas.
Se nota en el aire extremista anti hombres que adoptan las muchachas en el segundo libro y al que renuncian posteriormente, felices de volver a arreglarse el cabello.
Y se nota en varios pequeños momentos demasiado cursis y rosa.
Lo raro es que los chicos de relleno también fueron retratados de forma estereotipada, eran alérgicos a la higiene y demasiado impulsivos y tontos en las competencias físicas.
Y si debo ser sincera hay más de un momento donde el autor probablemente entendió mejor a las chicas adolescentes que yo misma, como una escena en la que una princesa le explica a Agatha cómo todas procuraban “enamorarse” de chicos diferentes para evitar conflictos; sin que nuestra protagonista pudiera entender cómo se ponían tácitamente de acuerdo con esas cosas (en esto yo soy totalmente Agatha).
Presiento que todo se debe a que el autor intentaba hacer el best-seller de fantasía para chicas adolescente de entre 13 a 16 años perfecto y echó mano de todo lo que pudo (incluyendo el supuesto estereotipo que las chicas tienen de sus contrapartes masculinas).
La verdad es que si no logró hacer dicha obra estuvo muy cerca. Yo hubiera amado este libro a mis 16, seguro que Tedros entraba a mi lista de enamorados ficticios. Tal vez me hubiera repelido tanta referencia a arreglos del cabello y maquillaje pero en general la historia está bien y eso es lo que siempre ha contado para mí.
Y si debo ser sincera hay más de un momento donde el autor probablemente entendió mejor a las chicas adolescentes que yo misma, como una escena en la que una princesa le explica a Agatha cómo todas procuraban “enamorarse” de chicos diferentes para evitar conflictos; sin que nuestra protagonista pudiera entender cómo se ponían tácitamente de acuerdo con esas cosas (en esto yo soy totalmente Agatha).
Presiento que todo se debe a que el autor intentaba hacer el best-seller de fantasía para chicas adolescente de entre 13 a 16 años perfecto y echó mano de todo lo que pudo (incluyendo el supuesto estereotipo que las chicas tienen de sus contrapartes masculinas).
La verdad es que si no logró hacer dicha obra estuvo muy cerca. Yo hubiera amado este libro a mis 16, seguro que Tedros entraba a mi lista de enamorados ficticios. Tal vez me hubiera repelido tanta referencia a arreglos del cabello y maquillaje pero en general la historia está bien y eso es lo que siempre ha contado para mí.
Creo que el autor disfrutó escribiendo esta saga y de hecho varias veces logró meter excepciones a mis quejas. Como dije en un inicio: No puedo recomendarlo a alguien que no sea apasionado de este género juvenil pero sí que tiene los aciertos que con gusto he compartido con ustedes.
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