lunes, 21 de octubre de 2013

Odio que nunca se me ocurran buenos títulos

Accidentally
I charm you and tell you of the boys I hate
all the girls i hate
all the words i hate
all the clothes i hate
how i'll never be anything i hate
Franz Ferdinand
The dark of matineé
Odio cosas que la mayoría de la gente también odia:

Odio lo atestado del metro

Odio la gente que se colea (malditos)

Odio pararme temprano

Odio o he odiado a un profesor…profesora, sincerémonos.

Odio que tomen mis cosas o se coman mi comida

Odio encontrar migas o rastros de otra cosa en la mantequilla

Traté de pensar en cosas que yo odiara de forma más singular. Me costó mucho, puedo mencionar fácilmente las cosas que me gustan pero no las que odio, no me conozco tanto como creía.

Odio las personas poco prácticas

Odio las personas sin sentido del humor (y la forma en que me miran)

Odio las personas que te atacan con preguntas retóricas y esperan que respondas

Odio cuando dicen “todos y todas”.  Porque entonces todos ya no significa todos

Odio los estampados de ropa de animales

Odio las injusticias, más que las malas obras, las injusticias

Odio la obra por escribir

Tal vez las palabra “odio” sea fuerte para algunas de estas. Es más bien “detesto”, pero no de una forma vil que me queme por dentro es…

                *Sigh* Odio tener que explicarme 

Dicen que el otro es necesario para definirnos a nosotros mismos. Creo que eso vale con lo bueno, pero también con lo malo. El ver el mundo y vislumbrar qué actitudes y códigos simplemente detestas te revelan qué aprecias.

Aunque no necesariamente las cosas que pones en práctica, pero es interesante cuando descubres algo nuevo que detestas y especialmente: la razón detrás de ello. En  ese sentido el odio es como una fiebre. El problema no es la fiebre, es lo que ocasiona la fiebre.

El “odio” no es malo. Es una repuesta emocional defensiva. Nos consume vivos si se deja sin control; pero nada mejor que el odio a los malos hombres para convertirse en uno bueno… o en un neo mal hombre. Qué rayos…
Odio tener que justificarme


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